sábado, 15 de marzo de 2008

Con el paso del tiempo

No recuerdo exactamente qué día fue, pero era también semana santa así que hará un año por estas fechas. Si que recuerdo quienes estábamos ese día, pero cuando lo lean lo recordarán por su cuenta, así que mejor mantener el anonimato.
Estuvimos tomándonos algo en una de las varias cafeterías-teterías de la plaza de la Merced, estudiando las posibilidades de ir al Viña Rock de ese año o bien acercarnos a hacer una visita a la ciudad de estudio de uno de los contertulios. Como tantas otras veces quedamos en que "ya veríamos más delante".
Cuando salimos de la cafetería comenzaba a anochecer. Ahí se nos unió uno de los asiduos al Ancla que había pasado la tarde viendo procesiones. Por casualidad pasaba por allí un trono de no se qué cofradía, con tan mala suerte (para ellos) que empezó a llover y tuvieron que aligerar el paso para intentar recoger el trono lo antes posible.
Como el agua también caía sobre nosotros encaminamos nuestros pasos hacía donde estaban aparcados nuestros coches para luego dirigirnos a casa de quién si no (impagable todas las veces que nos has soportado allí).
Preparamos algo de cena: macarrones con tomate. Sencillo, rápido, sabroso y saciante. Tras la sobremesa vimos una película que había traído grabada de mi casa. "La última noche": recomendación ("Allí encuentras el silencio, encuentras la paz, encuentras a Dios")
Como colofón a la noche el anfitrión nos estuvo sorprendiendo con fotos que desconocíamos o de las que no teníamos recuerdo de su existencia, haciendo escarnio de algunas de las personas y personajes que aparecían en ellas. Así hasta que llegó la hora prudencial de que cada cual volviera a su casa. El anfitrión tuvo que acercarme a la mía ya que, como todo el mundo sabe, soy demasiado flojo como para sacarme el carné de conducir (impagable todas las veces que diferentes personas me acercan a casa a altas horas de la noche)
Para muchos esto será un día normal, nada fuera de lo común, nada especial. Bueno, puede que llevéis razón, pero son estos días de los que, con el paso del tiempo, por ejemplo un año, guardas un agradabilísimo recuerdo.
Saludos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Impagable los cds que me haces para el coche!